Las guardianas del territorio

Huir de los tópicos para empoderar a las mujeres con su propia voz. Ésta fue una de las reflexiones durante el coloquio sobre el mundo rural y el feminismo que acogió ayer el Mercao Social La Tejedora, en Córdoba. El foro reunió a la autora, escritora y veterinaria de campo María Sánchez, a la agricultora en Hermisenda Huerta Natural, Rosa Pineda y a Isabel Vara del Instituto de Sociología y Estudios Campesinos (ISEC) y revista Soberanía Alimentaria. El encuentro arrancó a las 19.30 horas con una gran asistencia, la mayoría mujeres jóvenes, y durante la charla se abordaron los desafíos que se plantean sobre ruralidad, prejuicios y conflictos que asolan al medio rural.

Momento de la charla / Fotografía: Mar Morales

María Sánchez dio algunas pinceladas sobre su publicación Tierra de mujeres a través del empoderamiento y la idea de las mujeres invisibles. «Hay colectivos que están trabajando y resulta necesario huir de la imagen bucólica dela mujer que descansa en el campo», apuntó la escritora. Además abordó los retos sobre paternalismo, clasismo y machismo que se siguen dando. Para la veterinaria, las mujeres productoras son unas heroínas que resultan invisibles tanto a la administración como a parte de la sociedad y animó a conocer el mundo rural y los pueblos más allá de los estereotipos.

Vara mostró un ejemplar de la revista / Fotografía: Mar Morales

Por su parte, Isabel Vara presentó la revista Soberanía Alimentaria, que actúa a través de un sistema asambleario y con una «vocación feminista desde el mundo rural». De esta forma, se trata de un trabajo que utiliza un lenguaje inclusivo y neutral que actúa además con carácter interpelador y que analiza la diversidad con artículos como Montañas que se mueven. «Recuerdo que leí un cartel de una cooperativa donde rezaba nosotras producimos, nosotras trabajamos, nosotras decidimos», explicó Vara, que mostró además las ilustraciones que visten la publicación.

Así, Rosa Pineda explicó su labor e instó a los consumidores a mirar el etiquetado y a plantearse la procedencia. «¿Cómo es posible que compremos tomates de Chile o verdura de Pekín?», se preguntó teniendo en cuenta la huella ecológica de los productos. Además insistió en el valor sobre los artículos ‘bio’ ante la explotación humana. «¿De qué sirve que coloquen esas características cuando hay personas que no pueden tener derechos laborales?», describió la trabajadora. Además aconsejó respetar a los pueblos y en cuanto al movimiento #8M criticó el foco de las capitales respecto al resto de municipios. Para Pineda, «ellas no sufren un techo de cristal y hay que cuestionarse dónde quedan los suelos pegagosos». También destacó la importancia de preservar las semillas y de apostar por la economía local teniendo en cuenta la producción del territorio.

En el foro, las personas que participaron pudieron ofrecer su punto de vista acerca del feminismo y del entorno rural, se generó un debate respecto a las políticas agrarias y se recordó las consecuencias de la crisis climática. Para las ponentes, el papel de las mujeres que labran el entorno son de «verdaderas guardianas del terrirorio».

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s